A medida que estoy madurando, me doy cuenta de que el cine no es solo estar detrás de una cámara, el cine es contar historias y ese es su gran poder, el poder llegarle a la gente, removerles por dentro, hacerles pensar. Obviamente, he cambiado mucho desde los 5 años. Aún así, sigo siendo una niña de 17 años que ha vivido relativamente poco y aún me queda mucho por vivir. Pero eso no me quita mis ganas de hacer cine, mucho menos; me motiva a hacerlo. Porque, a lo mejor ahora no, pero en un futuro puedo hacer llorar a alguien en una sala de cine, hacer que se ría a carcajadas o, simplemente, que alguien disfrute de una película y que se le quede grabada en el alma.
He crecido en una familia de artistas que siempre me empujan a más. La verdad es que crecer así me ha hecho darme cuenta de que en realidad mi mayor "jurado" soy yo misma. Soy una chica muy autoexigente que cree fielmente en la frase: "Si no lo vas a hacer lo mejor que puedes, ¿por qué lo haces?" Porque, para mí, ningún trabajo está "demasiado bien" ni "demasiado mal", sino que es el principio de algo mejor y, para ello, me tengo que esforzar más. Siempre intento confiar en mí, en mi instinto, en lo que quiero transmitir cuando explico historias y en si lo hago de la manera más honesta para el espectador.
Llevo toda la vida estudiando para llegar a la carrera de mis sueños. Ha sido mi motivación y meta desde que empecé a hacer stop motion con mis muñecos de Pitufos. Así que entrar a ESCAC significaría el mundo para mí, sería todo por lo que siempre he soñado. Para mí, ESCAC no es una opción entre muchas, sino el único camino que me veo recorriendo, y llevo toda mi vida preparándome para ello. No quiero hacer cine solo para hacer películas, quiero hacer películas para que dejen huella. Quiero que sea en ESCAC donde empiece este camino, un lugar donde pueda estar rodeada de gente que viva y piense el cine como yo. Porque no sé si tendré suficientes historias para contar en un futuro, pero sé dónde quiero empezar a contarlas. No hay plan A, B ni C. Hay un SOLO plan. El plan: ESCAC.